Este viernes ha salido a la luz pública que el gobierno iraní ejecutó, esta semana, a tres hombres que habían sido previamente condenados a muerte por tráfico de droga, cargo con el que se relacionan las mayorías de las penas de muerte en el país árabe, según informó la agencia de noticias iraní Fars.
De acuerdo a esta fuente, las ejecuciones, todas en la horca, tuvieron lugar el martes en la mañana en la provincia noroccidental de Qazvin, con la intensión de «enseñar una lección a otros criminales», según palabras del fiscal provincial Esmail Sadequi-Niaraki.
Irán, con más de medio millar de ejecuciones al año, es uno de los primeros países del mundo en aplicación de la pena capital, según organizaciones internacionales.
En uno de sus últimos informes, el relator especial de la ONU para los Derechos Humanos en Irán, Ahmed Shahid, se mostró preocupado por el hecho de que el país haya multiplicado casi por siete las ejecuciones desde 2003.
En la República Islámica, un Estado teocrático musulmán chií, rige una interpretación de la ley islámica (Sharía) por la que se condena a muerte a los asesinos, violadores, narcotraficantes y a aquellos que atentan contra la ley de Alá.
DC/@DiarioContraste/EFE
EFE (Foto)