Xavi Hernández es un ícono del barcelonismo. Sin embargo, ese estatus que lo hace identificable como la esencia del Barça pudo haber tenido un rumbo muy distinto de haberse dejado llevar en el 2008 cuando el Bayern Múnich intentó ficharlo.
El catalán, jugador del Barcelona desde sus inicios como futbolista, confesó este jueves que coqueteó con el equipo bávaro antes que el técnico Pep Guardiola lo convenciera para quedarse en el club.
El volante español recordó que se reunió con el Bayern después de una mala temporada 2007-08, pero Guardiola «me dijo que no me podía ir, que el Barça que tenía en mente giraba alrededor de unos cuantos jugadores determinados, en torno a mí, que no podía dejar el club».
Xavi, en una entrevista con el diario Mundo Deportivo, señaló que las conversaciones con el equipo alemán «fueron bastante en serio. Incluso hubo una reunión con un técnico del Bayern y Branchini (agente FIFA)».
El mediocampista, que podría jugar su partido 700 con el Barsa el jueves ante el Getafe por la Copa del Rey, afirmó que su deseo es retirarse con la camiseta blaugrana, con la que juega desde 1998 y con el que ha ganado 22 trofeos con el club catalán.
DC/@DiarioContraste/MD
Nike (Foto)