La Guardia Civil rescató el miércoles a un bebé recién nacido de un contenedor de basura, al que fue arrojado dentro de una mochila.
El niño, de entre una y dos semanas de nacido, se encuentra hospitalizado en Madrid y su vida no corre peligro. Los investigadores tratan ahora de localizar a los padres, dijo a The Associated Press Ana Martín, portavoz de la Guardia Civil en la capital española.
El hallazgo se produjo a primera hora de la mañana en el municipio de Mejorada del Campo, a las afueras de Madrid. Un vecino que paseaba a su perro por la calle alertó a la policía porque escuchaba llantos de niño provenientes de un contenedor de basura. Una pareja de la Guardia Civil se presentó en el lugar y abrió el contenedor, que está soterrado, con ayuda de los bomberos.
El bebé estaba el interior de una mochila, encerrada a su vez en una bolsa de plástico. El niño fue ingresado en un centro sanitario y está en buen estado de salud.
Martín explicó que el bebé está vivo gracias a que fue localizado cuando todavía no calentaba demasiado el sol. La Guardia Civil cree que la intensa ola de calor que sufre la capital española desde hace semanas hubiera provocado la muerte del menor en cuestión de horas por la combustión de gases de la basura y las altas temperaturas.
Los agentes tratan ahora de ubicar a los padres para determinar qué ocurrió. Según Martín, el bebé no presenta signos externos de violencia y está bien nutrido. Se cree además que nació de un parto atendido en un hospital.